Seguir aquí y contigo
Desde el primer día,
hace más de 17 años,
removiste algo profundo de mi ser,
y, desde entonces, te empecé a buscar,
como se busca el agua en un desierto.
Desde que te vi,
Inalcanzable y misteriosa,
pensé que sería un triunfo conquistarte,
y me sentía tan diferente a tu lado,
como un mendigo dentro de un palacio.
Entonces descubrí que podía tocar,
por instantes breves,
el sentido profundo de esta vida.
Cuando te conocí,
en ese momento inolvidable,
supe que entre Dios y tú
existía una especie de acuerdo;
ambos sonríen cuando más aparento fortaleza,
y me miran con ternura,
cuando creo tener todas las respuestas.
Desde hace más de 14 años,
cuando iniciamos esta gran aventura,
decidimos construir una historia juntos,
llena de sueños y conquistas,
tardes grises y días llenos de sol.
De hoy en adelante,
asumiendo juntos el futuro de Romina y
ayudándonos a ser mejores personas,
te agradezco seguir aquí,
te confieso lo mucho que te admiro,
y te pido perdón por las lagrimas que he provocado,
Hoy, al borde de mi ventana,
en la orilla de mi mismo,
te pido, ante Dios, seguir siendo mi esposa.
Martín
29.10.11